SABOR DULCE DE FAMILIA, SABOR AMARGO DE SOLEDAD

Celebramos hoy que somos familia. Que somos hijos y hermanos y que sólo podemos dar sentido a ésto amándonos, ayudándonos, mirando por los otros, sirviendo antes de ser servidos... "ciñéndonos la toalla y lavando sus pies". Jesús supo (de saber y saborear) ser familia, ser amigo, amar y servir... hasta el extremo, hasta la entrega de su propia vida. Jesús fue consecuente con su vida y con su vocación de Amor hasta el final, hasta saborear la amargura de la soledad de quienes consideró su familia... pero siguió confiando en Dios, en Aquel del que aprendió que Amar, es el sentido de la vida.

NADA TE TURBE
(Santa Teresa de Jesús)

NADA TE TURBE, NADA TE ESPANTE
TODO SE PASA, DIOS NO SE MUDA
LA PACIENCIA TODO LO ALCANZA
QUIEN A DIOS TIENE, NADA LE FALTA
SOLO DIOS, SOLO DIOS BASTA

En Cristo mi confianza,
y de El solo mi asimiento,
en sus cansancios mi aliento,
y en su imitación mi holganza.

NADA TE TURBE, NADA TE ESPANTE
TODO SE PASA, DIOS NO SE MUDA
LA PACIENCIA TODO LO ALCANZA
QUIEN A DIOS TIENE, NADA LE FALTA
SOLO DIOS, SOLO DIOS BASTA

Aquí estriba mi firmeza,
aquí mi seguridad,
la prueba de mi verdad,
la muestra de mi firmeza.

NADA TE TURBE, NADA TE ESPANTE
TODO SE PASA, DIOS NO SE MUDA
LA PACIENCIA TODO LO ALCANZA
QUIEN A DIOS TIENE, NADA LE FALTA
SOLO DIOS, SOLO DIOS BASTA

Salomé Arricibita

Música: Teresa Nécega

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