DIEZ MINUTOS EN SILENCIO
Diez minutos en silencio
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Salmo 85
Enséñame, Señor, tu camino,
para que siga la verdad;
mantén mi corazón entero
en el respeto de tu nombre.
La tierra está llena de engreídos.
Bandas de insolentes atentan contra los que confían en Ti.
Tú, Señor, sigue siendo clemente,
lento a la cólera, rico en piedad.
Pero déjate ver.
Aunque sólo sea al trasluz.
Aunque sólo sea un momento.
Sólo al trasluz. Sólo un momento.
No hay peor soledad, que la soledad de Dios.
No hay peor desconcierto que la pérdida
de la brújula de la fe.
Cuando todo tenga sentido sin Dios
¡que Dios te ampare, hermano!