17 de noviembre, domingo 33 del TO

Luc 21, 5-19

"Pero antes de todo eso os echarán mano, os perseguirán, os llevarán a las sinagogas y las cárceles, os conducirán ante reyes y magistrados a causa de mi nombre, dándoos oportunidad de dar testimonio de mí"

Palabras apocalípticas las de Lucas, puestas en boca de Jesús. Hay que reconocer que jamás nadie ofreció tanto por tan poco, aunque los hechos las han refrendado con el tiempo. ¿Sería mucho despropósito pensar que esto se ha cumplido y se sigue cumpliendo hoy entre los suyos?

El Dios del Salmo 97, presentado como soberano majestuoso en medio de amenazantes nubarrones, envuelto en fuego y con Justicia y Derecho sosteniendo su trono, se ha mantenido -¡y cuántas veces disparado!- en la recámara de los poderes religiosos de todos los tiempos. En su caminar por el mundo, Jesús ha tenido siempre más próximos a los mártires que a los confesores, y que éstos me perdonen. Él hizo lo mismo y sus adeptos le imitan: "Aléjese de los palacios el que quiera ser justo" (Marcio Anneo Lucano).

¿Por qué el misterio de la Crucifixión y de la Muerte ha sido más representado en el Teatro del Mundo que el de la Resurrección y de la Vida? El pasado 14 de septiembre, TVE retransmitió el Viacrucis Magno Extraordinario por el Año de la Fe, en Córdoba la Sultana. Abría la Procesión la imagen de Ntra. Señora Reina de los Santos Mártires, seguida de las 15 estaciones: 14 de la Vía Dolorosa y una tan solo del Señor Resucitado. Participaron en el espectáculo 18 Hermandades cordobesas.

Lástima que no pudieran hacerlo las de "Los Apaleados, Asaltados, Robados y Abandonados medio muertos al lado de los caminos", "Los Quemados Antes y Ahora en las Hogueras de la Santa Inquisición por Pensar de Distinta Manera", "El Desamparo de los Divorciados", "Homosexuales, Lesbianas y Prostitutas Unidos", "Las Verónicas Excluidas del Reino de los Altares en la Tierra" y, finalmente, "Los Pobres de la Beneficencia del Mundo Entero".

El obispo de Roma, fiel seguidor de Jesús el Nazareno, hubiera propiciado la presencia de estos segundos. "La espiritualidad de Bergoglio no está hecha de 'energías en armonía', como las llamaría él, sino de rostros humanos". Su reciente Cuestionario enviado a obispos y fieles para preparar el próximo Sínodo de la Familia de 2014, preludia esta venturosa realidad. Francisco I hubiera centrado el contenido de la Procesión en la Vida, en la entrega a los demás: "Los ministros del Evangelio deben ser personas capaces de caldear el corazón de las personas, de caminar con ellas en la noche, de saber dialogar e incluso descender a su noche y su oscuridad sin perderse". (Entrevista de A. Spadaro en Civiltá Cattolica).

Hay un proverbio español –"la procesión va por dentro"- que me sugiere la siguiente reflexión: ¿Qué tipo de Procesión estamos paseando habitualmente cada uno de nosotros por las calles cordobesas de nuestra interioridad? ¿La de semblantes teológicos o la de rostros humanos, que reflejan más nítidamente la normal fisonomía de Jesús?

NO TENGAS MIEDO

Du-I-Nun, constantemente perseguido por los ulemas, fue arrestado por orden del sultán Mutawakkil y llevado a Bagdad para comparecer ante él. Tenía miedo, el tan humano miedo.

En la puerta de entrada encontró a una viejecita impotente que, adivinando su estado de ánimo, le dijo: Cuando seas introducido a la presencia de este hombre, no tengas miedo de él y no pienses que está por encima de ti. Sois los dos criaturas, engendrados de una misma semilla y hechos de una misma arcilla. Ante Dios él está tan desnudo como tú. No te defiendas, tengas razón o seas considerado culpable. ¿Por qué? Si tienes miedo de él, se crecerá ante ti, y si te defiendes, ello sólo agravaría tu caso; sería como si acusaras injustamente a Dios. No ha de ignorar lo que es de ti, porque El sabe que eres inocente; no tienes más que rogarle para que venga a socorrerte, y no trates de vencer por ti mismo, porque te dejaría entre tus propias manos.

Rumi

Vicente Martínez