Hermanos. Jesús se nos presenta como la Buena Noticia que se anuncia a todos los pueblos, no sólo a Israel. Y la Buena Noticia, que es liberación, enorme alegría para todos los pobres, los pecadores, los que sienten necesidad de Dios. Oremos.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

• Que en nuestra querida Iglesia todos encontremos nuestro lugar y nuestra función; que todos nos sintamos necesarios, sin sobresalir sobre los demás, sino gastándonos en el servicio al prójimo.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

• Que nuestra comunidad parroquial o religiosa, sea la casa de todos, el lugar donde todos participamos por igual y celebramos con gozo nuestra vida y nuestra fe.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

• Que todos los hombres y mujeres que viven con dificultad nos encuentren dispuestos a echarles una mano y juntos hagamos posible el Reino del Padre.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

• Que todos pongamos de nuestra parte para que la unidad de los cristianos sea posible, que seamos signos de unidad y paz.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

• Que los enfermos encuentren en nosotros los cuidados que necesitan y consuelo en el corazón de nuestro buen Dios.

Padre, que todos seamos uno en tu corazón

Padre bueno, concédenos la conciencia de que nuestras cualidades son "dones", regalos que tú nos haces para el bien común. Te damos las gracias por el gran regalo de Jesús, tu hijo amado; él nos enseña el camino que nos lleva a ti.

Vicky Irigaray