Hermanos, Marcos destaca que el reinado de Dios está presente, que la buena noticia de Dios es ya una realidad. Y que el anuncio de Jesús tiene un tono de alegría, y al mismo tiempo, de urgencia y que va dirigido a todos y cada uno de nosotros. Oremos

Jesús, queremos seguir tus huellas.

• Padre, que la Iglesia proclame tu Reino como un presente que ofrece nuevas posibilidades, que se preocupa especialmente de los más vulnerables y un Dios Salvador que nos ofrece la liberación a todos.

Jesús, queremos seguir tus huellas.

• Padre, que todos los creyentes nos demos cuenta que tu reinado nos pide un cambio en lo socialmente establecido y un cambio en lo personal, en nuestro interior: que sintamos la llamada a apostar especialmente por los más pobres y marginados.

Jesús, queremos seguir tus huellas.

• Padre, tu hijo busca colaboradores, que nos sintamos llamados en medio de nuestra tarea diaria a echar o remendar las redes; que escuchemos tu llamada en nuestro entorno corriente, en el puesto de trabajo, en medio de las tareas diarias…

Jesús, queremos seguir tus huellas.

• Padre, que nuestra comunidad parroquial se preocupe en ofrecer espacios para la oración, para la formación y maduración de la fe, para aprender a construir nuestra vida en tu seguimiento.

Jesús, queremos seguir tus huellas.

Padre bueno, que tu Iglesia sea la comunidad de los hombres y mujeres que creen en tu hijo Jesús, que dan importancia a lo que él le dio, que se interesan por lo que él se interesó y defienden la causa que Jesús, tu hijo defendió. Te damos las gracias porque confías en cada uno de nosotros.

Vicky Irigaray