Buscador Avanzado

Autor

Tema

Libro de la biblia

* Cita biblica

Idioma

Fecha de Creación (Inicio - Fin)

-

PLEGARIAS DE SEMANA SANTA Y PASCUA

Rate this item
(5 votes)

Jueves Santo


GESTOS DE AMOR FRATERNO


Cenar con los amigos,

abrirles el corazón sin miedo,

lavarles los pies con mimo y respeto,

hacerse pan tierno compartido

y vino nuevo bebido.

Embriagarse de Dios,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Visitar a los enfermos,

cuidar a ancianos y niños,

dar de comer a los hambrientos

y de beber a los sedientos;

liberar a presos y cautivos,

vestir a los desnudos,

acoger a emigrantes y perdidos,

sepultar dignamente a los muertos.

No olvidarse de los vivos,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Enseñar al que no sabe,

dar buen consejo al que necesita,

corregir al que se equivoca,

perdonar injurias y torpezas,

consolar al triste,

tener paciencia con las flaquezas del prójimo.

Pedir a Dios por amigos y enemigos,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Trabajar por la justicia,

empeñarse en una paz duradera,

decir no a las armas,

desvivirse en proyectos solidarios,

reducir nuestras cuentas y carteras,

superar las limosnas.

Amar hasta el extremo,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Ofrecer un vaso de agua,

brindar una palabra de consuelo,

denunciar leyes injustas,

parar el viaje de los negocios propios,

cargar con el herido

aunque no sea de la familia,

salir de mi casa y círculo

–chiringuito, grupo o castillo–.

Construir una ciudad para todos,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Realizar el trabajo debidamente.

No defraudar a Hacienda.

Respetar la dignidad de todos.

Defender los Derechos Humanos.

Romper fronteras y guetos.

Dudar de fortunas y privilegios.

Crear desconcierto evangélico.

Amar como él nos ama,

e invitar a todos a hacer lo mismo.

 

Etcétera, etcétera, etcétera...

 

Un gesto sólo, uno sólo

desborda tu amor,

que se nos ofrece como manantial de vida.

Si nos dejamos alcanzar y lavar,

todos quedamos limpios,

como niños recién bañados,

para descansar en tu regazo.

¡Lávame, Señor!

¡Lávanos, Señor!

 

 

Viernes Santo

 

HACERME CARGO

 

Hacerme cargo de la realidad,

de la que me rodea y sostiene,

de la que me nubla o da horizonte,

de la cercana, de la lejana;

de la realidad de Dios

que es la creación entera;

de la realidad de los otros,

tan diferentes y hermanos,

y de mi .propia realidad,

tan humana que me afecta todos los días.

 

Hacerme cargo de la realidad

y, para ello, mirar de frente y ver;

escuchar a quienes no tienen voz;

entrar en las entrañas del mundo

y detener el viaje de mis negocios;

dejarse llevar serenamente, sin resistir,

a donde nuestro corazón nos lleve;

estar siempre donde hay que estar

aunque sintamos el ruido o la soledad;

y no volver ni cuerpo ni espíritu para atrás.

 

Hacerme cargo de la realidad

recorriendo los caminos de la periferia,

sintiendo sus voces, gritos y susurros,

percibiendo sus fragancias abiertas,

consciente de mi talante y momento,

de este lugar, día y sentimiento,

porque la realidad, cualquiera, está más llena

de dolor, caos y tiniebla

o de belleza, misterio y futuro,

según nuestro lugar de refugio y vida.

 

Hacerme cargo de la realidad,

sin metáforas, símbolos y poesía,

tal como la viven quienes están dentro de ella,

fajándonos en las distancias cortas

para evitar viajes de ida y vuelta;

hacerme cargo y seguir la tarea

conjugando quehaceres, sendas e historias;

esperando, quedamente y en silencio,

a que tu Palabra de vida nazca

y florezca en nosotros tu luz y sabiduría.

 

Hacerme cargo de la realidad

Como Tú lo hiciste

Y nos propusiste

al inicio de esta historia,

dejándonos tocar, golpear,

herir, desangrar y crucificar...

o besar por ella.

 

 

Vigilia Pascual


BENDICIÓN DEL FUEGO


Bendice, Señor, este fuego

y todas las hogueras que se alzan en el mundo

para quemar lo viejo

y alumbrar lo nuevo.

 

Bendice este fuego y todos los fuegos

que nos dan calor y vida,

que nos acrisolan y purifican,

que nos hacen maleables

y nos llenan de tu Espíritu.

 

Bendice este fuego y todos los fuegos

que alumbran nuestro caminar día a día,

que nos descubren nuevos horizontes,

que alejan la oscuridad y el miedo,

que llenan de luz nuestro mundo,

que hacen que los hechos y las cosas

tengan brillo y vida.

 

Bendice este fuego y todos los fuegos

que nos recuerdan que Jesús sigue vivo,

que Él es la luz del mundo,

que Él es nuestra luz,

que gracias a Él no estamos en tinieblas,

y que podemos ser antorchas encendidas.

 

Que su luz nos acompañe hoy y siempre.

Que su fuego caliente y enternezca nuestros corazones.

Que sus brasas purifiquen nuestras entrañas.

Que todos participemos de su claridad.

¡Que nos quememos en su hoguera!

Y que la Iglesia resplandezca como Buena Noticia

ante todas las personas que buscan y quieren

la paz, la justicia, el amor, la solidaridad.

 

Bendice este fuego y todos los fuegos

que nos hacen ser más humanos,

que nos recuerdan que somos hijos e hijas,

que nos invitan a ser hermanos

y que hoy nos dan la posibilidad de gozar

con tu paso, con tu pascua, con tus regalos.

 

¡Bendice este fuego que nos ha reunido!

 

PREGÓN: ES LA HORA DE LA VIDA NUEVA


Es hora de entrar en la noche sin miedo,

de atravesar ciudades y pueblos,

de quemar lo viejo y comprar vino nuevo,

de quedarse en el corazón del mundo,

de creer en medio de la oscuridad y los truenos.

¡Es la hora de la vida nueva!

 

Es hora de levantarse del sueño,

de salir al balcón de la vida,

de mirar los rincones y el horizonte,

de asomarse al infinito aunque nos dé vértigo,

de anunciar, cantar y proclamar.

¡Es hora de la vida nueva!

 

Es hora de romper los esquemas de siempre,

de escuchar las palabras del silencio,

de cerrar los ojos para ver mejor,

de gustar su presencia callada,

de andar por los desiertos.

¡Es hora de la vida nueva!

 

Es hora de despertar al alba,

de descubrir su presencia entre nosotros,

de iniciar caminos nuevos,

de andar en confianza,

de pasar a la otra orilla.

¡Es la hora de la vida nueva!

 

Es la hora de confesar la vida,

de hablar poco y vivir mucho,

de arriesgarlo todo apostando por Él,

de sentarse a la mesa y calentar el corazón,

de esperar contra toda esperanza.

¡Es la hora de la vida nueva!

 

¡Es Pascua, el paso de Dios por nuestro mundo

lavando las heridas,

sembrando esperanza,

levantando la vida,

llenando de semillas nuestras alforjas vacías!

 

 

Domingo de Resurrección


¿Y SI DIOS FUERA...?


¿Y si Dios fuera "el viento"

que penetra por la nariz y por todos los poros

hasta oxigenarnos los pulmones y el espíritu?

 

¿Y si Dios fuera "el silencio"

que envuelve cada noche en papel de celofán

nuestros sueños azules y locos?

 

¿Y si Dios fuera "el río"

que baña y refresca nuestros pies cansados

y calma nuestra sed de vida y ternura

en este mundo peregrino?

 

¿Y si Dios fuera "la roca firme"

que se alza en el horizonte

y que protege a vecinos y transeúntes

de tormentas, calores, huracanes y nieves?

 

¿Y si Dios fuera "el perfume"

que llena nuestra vida de gozo y placer

sin pedirnos nada?

 

¿Y si Dios fuera "el fuego"

que quema y consume nuestras entrañas

para que resplandezcan esas pepitas de oro escondidas?

 

¿Y si Dios fuera "la música"

que nos invita a cantar y bailar en las plazas

rompiendo todas las reglas con alegría?

 

¿Y si Dios fuera "el rocío"

que nos refresca cada día la historia y la vida

para que andemos despiertos y erguidos?

 

¿Y si Dios fuera "el mendigo"

que nos tiende su mano

sin atreverse a confesar sus miedos y sus hambres?

 

¿Y si Dios fuera "el emigrante"

que expone su vida en toda travesía

y que ya no sabe dónde asentarse

porque le hemos confiscado todas sus creaciones?

 

¿Y si Dios fuera "el niño"

que desde las ventanas de su cuerpo

nos hace carantoñas de plastilina?

 

¿Y si Dios fuera "el seno materno"

que todos necesitamos

para nacer y volver a nacer a esta vida

que nos ofrece ser hijos, hermanos y libres?

 

¿Y si Dios fuera "el grito"

de los pueblos oprimidos en la tierra

que viven y mueren ignominiosamente

reclamando un puñado de libertad?

 

¿Y si Dios fuera "Jesús de Nazaret"

muerto y resucitado hace dos milenios,

y en la actualidad estandarte de vida y esperanza

de pobres, humildes, misericordiosos y perseguidos?

 

¿Y si Dios fuera a la vez

viento, silencio, perfume,

fuego, música, rocío, río,

mendigo, niño, grito,

roca firme, emigrante, seno materno,

¡Jesús el Nazareno!?

 

¿Y si tú y yo también fuéramos Dios

–dioses en miniatura– con la responsabilidad

de convertir este mundo inhóspito

en un "reino" de paz y de fraternidad?

 

¿Y si Dios fuera ¡todo!,

todo lo que vemos,

sentimos,

ignoramos,

y deseamos?

 

Florentino Ulibarri

Read 11523 times
Login to post comments