Hermanos y hermanas, la fiesta de los Magos nos recuerda que el proyecto de Reino de Jesús no tiene fronteras: no importa ni procedencia, ni raza, ni religión, ni clase social. Oremos.

El Reino de Jesús es para todos

• Necesitamos una Iglesia de todos y para todos, que proclame la liberación, nos recuerde la llamada a la fraternidad universal y el cuidado siempre y en toda circunstancia de los más desfavorecidos de este mundo.

El Reino de Jesús es para todos

• Necesitamos hombres y mujeres que sean semilla del Reino de Jesús, que se comprometan en nuestras instituciones políticas y sociales, que velen siempre por los derechos de los más frágiles.

El Reino de Jesús es para todos

• Necesitamos ensanchar nuestra capacidad de acogida, aprender a mirar a los diferentes como iguales, a dejarnos afectar de verdad por la vida rota de tantos y tantas.

El Reino de Jesús es para todos

• Necesitamos cuidar de todos los niños y niñas de este mundo, en especial de aquellos que hoy no tendrán regalos y que sólo esperan y necesitan sentirse alguien para alguien.

El Reino de Jesús es para todos

• Necesitamos aprender a vivir en clave de acción de gracias; conscientes de todo lo que se nos da cada día, escuchando la llamada al compromiso con toda la humanidad.

El Reino de Jesús es para todos

Padre Madre buena, por encima de lo que somos, de lo que nos sucede y hacemos, está la fuente del Amor que no deja de brotar nunca y que nos abre a la esperanza de un mundo nuevo más humano y habitable para todos.

Vicky Irigaray