Hermanos y hermanas, Jesús se muestra como juez implacable de los que hacen alarde de su dinero y poder; y se sitúa como defensor de los más pobres. Oremos.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

• Padre Madre buena, que la mirada de la Iglesia acierte a ver más allá de las apariencias y se fije e incline siempre y en toda circunstancia, en los hombres y mujeres que, aparentemente, no merecen atención.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

• Padre Madre buena, ojalá que la escucha de la Palabra de hoy nos haga tomar conciencia de cómo hemos configurado nuestro modelo de sociedad y convivencia basado en el tener y no en el ser.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

• Padre Madre buena, que nuestra fe en Jesús de Nazaret nos empuje a vivir lo de cada día con sentido más humano, denunciando con nuestra palabra y vida “la neurosis de posesión” que padece nuestra sociedad.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

• Padre Madre buena, que en nuestras comunidades parroquiales y religiosas valoremos a las personas desde su capacidad de servicio y solidaridad, denunciando lo que nos mueve el poder y el tener.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

• Padre Madre buena, que no tranquilicemos nuestra conciencia con donativos que siempre dejan a salvo nuestra calidad de vida, sin ser capaces de estar cerca de quienes nos necesitan.

Queremos construir un mundo basado en la solidaridad y hermandad

Las palabras de Jesús nos obligan a preguntarnos si vivimos solo dando de lo que nos sobra o sabemos dar, como la viuda del Evangelio de hoy, algo de nuestra propia vida.

Vicky Irigaray