4º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Vicky IrigarayHermanos y hermanas, Simeón y Ana, profundamente religiosos, mantienen viva, a pesar de su edad avanzada, la esperanza del Mesías y la inminente liberación de su pueblo. Oremos.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
• Que la Iglesia sea luz que ilumine a todos los pueblos, presencia liberadora, refugio para los pobres, descanso para los desorientados y Buena Noticia para toda la humanidad.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
• Que nuestras comunidades parroquiales y religiosas proclamen el mensaje de Jesús; muestren en nuestros barrios y pueblos el camino liberador del Reino.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
• Que como Simeón y Ana sepamos descubrir en lo de cada día y con los de cada día la presencia de Dios, el cumplimiento de sus promesas y la novedad de su salvación.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
• Que todos nosotros y nosotras nos dejemos guiar por el Espíritu para poder entender, descubrir y experimentar los caminos de Dios y su propuesta liberadora.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
• Que en nuestros hogares se hable de Jesús, de su propuesta de vida, de su compromiso con el Reino, de su esperanza y confianza en su Padre Madre.
Queremos iluminar la vida de los hermanos y hermanas.
Padre Madre Buena, que seamos capaces de descubrir en los signos normales de cada día tu presencia liberadora y tu apuesta en favor de una hermandad universal.
Vicky Irigaray