DIOS BUENO, CONCÉDENOS UN CORAZÓN HUMILDE
Vicky IrigarayEl fariseo estaba convencido de merecer el favor de Dios, también nosotros a veces estamos muy seguros de nuestros méritos y nos atrevemos a exigir lo que creemos es justo para nosotros. Presentemos a Dios nuestras necesidades y confiemos en El.
Dios bueno, concédenos un corazón humilde.
• Te presentamos, querido Dios, a toda la Iglesia, a todos los que queremos seguir a tu Hijo Jesús, haz que nuestra vida entera sea sacramento de tu presencia en medio de los hombres y mujeres.
Dios bueno, concédenos un corazón humilde.
• Te presentamos, querido Dios, a todos los hombres y mujeres que viven en la dificultad, haz que encuentren en nosotros la ayuda que necesitan y que siempre estemos dispuestos a acogerles sin prejuicios.
Dios bueno, concédenos un corazón humilde.
• Te presentamos, querido Dios, a todos los que tienen la responsabilidad de gobernar en nuestras instituciones, que en su tarea busquen el bien de los más desfavorecidos.
Dios bueno, concédenos un corazón humilde.
• Te presentamos, querido Dios, los países que están en guerra, que cese la violencia y busquen la paz mediante el diálogo y el encuentro.
Dios bueno, concédenos un corazón humilde.
Padre, estas necesidades y aquellas que cada uno llevamos en nuestro corazón quieren ser nuestra mejor ofrenda en este día. Gracias, porque nos escuchas y nos cuidas.
Vicky Irigaray