2 TIMOTEO 2, 8-13
TimoteoHaz memoria de Cristo el Señor, resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David. Este ha sido mi evangelio por el que sufro hasta llevar cadenas como un malhechor. Pero la Palabra de Dios no está encadenada.
Por eso lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen su salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna.
Es doctrina segura:
Si morimos con Él, viviremos con Él.
Si perseveramos, reinaremos con Él.
Si lo negamos, también Él os negará.
Si somos infieles, Él permanecerá fiel,
porque no puede negarse a sí mismo.
Para releer el comentario de José E. Galarreta, pinche aquí